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Gance

Crónicas de una noche Navideña

En un lugar que no vale ni la pena mencionar, comenzaba a caer la tarde y la noche se apoderaba de la explanada, se podía sentir en el aire una tensión propia de aquellos que están a punto de salir de prisión.
Las calles alborotadas por señoras en batones gritándoles a sus hijos que se vayan a bañar mientras ajetrea una ya gastada pantufla, mientras estos depositan cautelosamente un par de petardos a las patas de unas viejas que vuelven de misa.
Ya son las 8:30 y el patrón de la casa que ya comenzó a disfrutar de una aperitivo con los vecinos, mientras va adobando despacitooo el lechón que trajo de la estancia de Carlos M.
Ya son 22:00 Hs. Y extrañamente aquello que hasta hacia menos de dos horas era un caos vial, gritos ensordecedores y perros corriendo ahuyentados a fuerza de pólvora, ahora esta todo silencioso. El silencio es uno de los estados mas terribles que existe, el peligro se esconde en el silencio, y no en la oscuridad. Y así en las calles del pequeño pueblo, no quedaron mas que los reflejos titilantes de las lucecitas que son el único alumbrado que existe. La estridente musiquita de las lucecitas ya irritaron hasta el mas paciente de los Navideños.
Este silencio solo indicaba un cosa, el proletariado estaba empezando a cenar. Lechón, pollo relleno, vitel tone, ensaladas rusa, polaca, gallega, picaditas jamos, quesito, palmitos, cerveza, vino, gaseosa, fernet wisky champagne. Los gritos de todos hablando al mismo tiempo los viejos discutiendo que los tiempos eran miles de veces mejores cuando ellos eran jóvenes, que los futbolistas solo juegan por la guita, el grito del tío que advierte que VIVA PERON CARAJO, distinguiendo su ya entrado estado de “alegría”
En fin los temas recurrente de todos los años, hasta que uno dice huuuuu, no doy mas, comí como un cerdo, y allí comienzan todos a caer rendidos ante la batalla alimenticia que deja sus cadáveres en la mesa.
Los fuegos artificiales ya empezaron y uno dice , YA SON LAS DOCE, noo que van a ser, faltan 2 minutos, PERO no ves que todo el mundo esta tirando cuetes ya.. Debemos tenes los relojes atrasados, Ya son las DOCE, NOOO que faltas 15 segundos con 45 pendejesimas.. OK. YA SON LAS DOCEEEEEE!!!!!!..
Y es alli donde todos se saludan (si es que logran levantarse) y todo esta bien, la yegua de la cuñada de mi hermana que saluda a mi vieja como si todo estuviera bien, sabiendo que al otro día le va a contar a sus vecinas de lo gorda que estaba, y de las porquerías que cocino.
Heee, feliz navidad me dice mi hermano, el cual no me hablaba desde ya hace mas de 6 meses, pero que va, Los barzazos los besos de las abuelas que quedan mojados junto a su labial INSALIBLE. Y así terminamos de saludar y vemos a los mas chicos tirar cuetes, y a las viejas gritar GUARDA NENE QUE TE VAS A QUEMAR!!! Mientras nosotros (los jóvenes ) los miramos y decimos Ja, cuetes eran los de antes... Mientras por dentro quisiéramos estar tirando cañitas voladoras, y triangulitos y explotando cosas. Y rogando al desengañado Papa Noel que nos regale 5 o 6 años menos.
Y asi la sobre mesa mas discusión mas brindis, y como es de costumbre al otro día a juntarse a comer las sobras y decir. A la pucha que se paso volando el año..—

Esta es una típica reunión navideña, Aunque no todos tiene la suerte de tener tan feliz reunión.
La Navidad es símbolo de vida, de esperanza, de sentir ciegamente que el año que viene vamos a ser mejores personas. Seas judío, musulmán, yoghi, cristiano o tensita, la navidad nos hace mejores personas, que lastima que cuando las lucecitas se apagan volvemos a ser los mismo.
Igualmente, sigo manteniendo mi esperanza en alto y ruego que papá Noel, lea mi carta y me de la posibilidad aunque sea de una sola noche volver a tener 14 años.

2 comentarios

Cas -

yo ni lucecitas tuve...

Matías -

Realmente, la mejor y más precisa descripción de una cena navideña familiar argentina.

Espero que la tuya haya sido así (sin las malas ondas); y no te preocupes por el tema de la edad. Si querés, portate como de 14 cuando estés con nosotros, sólo nos vamos a cagar de risa y nada más :p